En este trabajo de rehabilitación de vivienda en el casco histórico de Cádiz lo mas importante era dignificar su vida sin perder la memoria. Inyectar los adelantos técnicos de la contemporaneidad y dotar de la ventilación e iluminación necesaria para crear espacios habitables donde antes no los había, con un guiño a nuestra época sin caer en la estandarización y racionalización de los espacios, sino aprender de lo casual y arbitrario para enriquecer lo particular de cada uno.

Recuperamos un pedazo de historia con la integración de antiguos elementos y volvimos a regalar un espacio de protección a los habitantes de la casa.

Utilizamos morteros de cal para los paramentos ya que esto era lo más óptimo para la rehabilitación y restauración del patrimonio histórico, por presentar una mejor compatibilidad con los morteros antiguos y por mantener una estética tradicional.

Para el suelo se optó por la tarima de madera maciza en toda la vivienda excepto en las zonas húmedas.

La casa contaba con un gran patio central donde se fabricó una galería de madera en tonos blancos al estilo tradicional gaditano.

Las vigas de techo de madera se restauraron y trataron con un acabado natural, aunque desde un primer momento se encontraban en bastante buen estado.

Las paredes de piedra ostionera que se pudieron conservar marcarían el carácter antiguo que en todo momento se quiso mantener en la vivienda.

La casa consta de 2 dormitorios, uno de ellos, el principal con paramento de ladrillo taco de más de 200 años recuperado de un cortijo sevillano, armario formado aprovechando hornacina de antigua despensa y cajonera debajo de ventana para el aprovechamiento de espacio.

El segundo dormitorio se encuentra en la parte superior encima de la cocina con un cierre de cristal y hierro formando cuadrículas que queda totalmente integrado compaginando estilos.

El salón y la cocina forman el espacio más grande de la casa, y consta de tres balcones a la calle, uno de ellos interior tipo cierro, y dos abiertos.

Cocina y salón quedan integrados en un solo espacio donde se ubica una zona de descanso con sofás y tv, zona comedor y zona de trabajo.

Consta de dos baños completos, en uno de ellos se ha podido mantener parte de la pared de piedra y los techos altos combinándolo con madera y cerámica tanto para suelo, paredes y ducha de un tono claro muy neutro y con uniformidad de color.

El segundo baño tiene un aire algo más moderno y se ha utilizado una cerámica de un tono gris piedra en paramentos, suelo y ducha. Se fabricó una hornacina al fondo de la ducha que le da una nota de distinción y de practicidad al baño.

La vivienda cuenta en total con 80m2.