Recibimos el encargo de convertir una vivienda de escasas dimensiones en un coqueto apartamento turístico.
La ubicación del mismo se encontraba en un entorno privilegiado junto a la catedral de Cádiz y en frente de la cueva del pájaro azul recientemente abierto al público y antiguo puerto fenicio.
En la rehabilitación de esta vivienda que data del S.XVIII se han podido conservar elementos tan importantes como las vigas de madera y paramentos de ladrillo y piedra ostionera, haciendo con estos un guiño a nuestra época y no cayendo en la estandarización de los espacios.
Para la solería hemos optado por un suelo hidráulico fabricado de forma artesanal en tonalidades azules que le dan un aspecto muy fresco y mediterráneo.
La casa consta de un salón con cocina integrada y un dormitorio con un baño integrado, todo con una distribución equilibrada en las estancias para que los inquilinos dispongan de amplitud y serenidad en todo el espacio interior.
El baño tiene un aire algo mas moderno y se ha utilizado una cerámica de un tono gris piedra en paramentos, suelo y ducha combinada con pared de piedra ostionera y techos con vigas de madera. También se ha fabricado una hornacina al fondo de la ducha que le da una nota de distinción y de practicidad al baño.
La vivienda cuenta con un total de 45m2.